Para hablar sobre la fractura de tobillo, primero debemos aclarar bien la anatomía del tobillo, que está formada por la tibia, el peroné y el astrágalo.
Articulación del tobillo
La unión de la tibia y el peroné se produce por una fuerte membrana fibrosa, y el anclaje de ambas al astrágalo mediante los ligamentos del tobillo. Esto hace que las fracturas aisladas de uno de los huesos del tobillo no alteren la estabilidad ósea. Sin embargo, cuando la lesión afecta a más de un hueso, o afecta también a otras estructuras como la membrana fibrosa o los ligamentos del tobillo, el riesgo de desplazamiento de la fractura es alto.
¿Qué es la fractura de tobillo?
La fractura de tobillo es la rotura de alguno de los huesos del tobillo, ya sea de forma parcial o completa. En el tobillo, las fracturas afectan los extremos lejanos o distales de la tibia, el peroné o ambos huesos.
Las fracturas de tobillo son lesiones muy habituales y que suelen ser causadas por el giro del tobillo hacia fuera o dentro. En muchos casos, la gente las confunde con esguinces pese a ser lesiones muy distintas que requieren un diagnóstico precioso y temprano.
Pronóstico de la enfermedad
La gravedad de una fractura de tobillo puede variar, ya que abarca desde pequeñas fisuras en los huesos hasta quebraduras que atraviesan la piel.
Si se trata debidamente suele seguir una evolución favorable y la función del tobillo es totalmente recuperable. Para conseguir una óptima recuperación es importante seguir los consejos de rehabilitación del médico especialista.
Síntomas de la fractura de tobillo
Los síntomas suelen ser muy característicos y pueden incluir:
- Dolor inmediato
- Dolor que aumenta con la actividad y disminuye con el reposo
- Hinchazón en el tobillo lesionado
- Deformidad
- Incapacidad para mover el tobillo o soportar peso
- Hematomas
- Sensibilidad
Pruebas médicas para fractura de tobillo
El especialista realizará una exploración física y evaluará la sintomatología que exponga el paciente, además de conocer cómo se ha producido la lesión. A continuación buscará zonas sensibles en el pie y el tobillo, ya que ubicar el punto principal del dolor puede determinar su causa. También es posible que mueva el tobillo y pie para ver la amplitud de movimiento.
Algunas de las pruebas de diagnóstico que puede utilizar el médico son:
- Radiografías
- Tomografía computarizada
- Imágenes por resonancia magnética
¿Cuáles son las causas de la fractura de tobillo?
Las causas más habituales de fractura de tobillo son las siguientes:
- Accidentes de tránsito
- Caídas
- Impacto con un objeto pesado
- Traspié
- Una sobrecarga, un uso excesivo de los huesos
¿Se puede prevenir?
Es difícil de prevenir pero se pueden seguir una serie de consejos que pueden ser útiles para evitar factores de riesgo:
- Usar zapatos adecuados, tanto en el trabajo como en la práctica deportiva.
- Reemplazar el calzado de forma periódica.
- Realiza una sesión de calentamiento antes de hacer un ejercicio prolongado.
- Desarrolla y fortalece los músculos de los tobillos.
- Usa el cinturón de seguridad.
- Evita tener objetos peligrosos o desorganizados en tu casa, para evitar caídas o tropiezos.
Tratamientos para la fractura de tobillo
El tratamiento de una fractura variará según la gravedad de la lesión. Entre los tratamientos que se aplican encontramos los siguientes:
- Colocar las partes del hueso en su sitio, lo cual puede requerir de anestesia o cirugía.
- Mantener las partes unidas con un yeso o férula.
- Mediante cirugía, implantar placas de metal con tornillos o una varilla en la mitad inferior de hueso.
- Medicamentos para paliar el dolor.
Normalmente, cuando no es necesaria la cirugía, el paciente suele usar yeso durante un mínimo de seis semanas. En líneas generales, los pacientes suelen necesitar un periodo de entre seis y diez semanas para recuperarse de una fractura de tobillo.