Generalmente, las personas más jóvenes (de 30 a 60 años) son más propensas a experimentar dolores de espalda por una distensión muscular lumbar o surgidos del espacio intervertebral mismo. Un claro ejemplo es la lumbalgia, de la que hablaremos a lo largo de este artículo.
¿Qué es la lumbalgia?
La lumbalgia, uno de los dolores de espalda más habituales, generalmente afecta al área inferior de la espalda. El dolor de espalda puede ser un síntoma de una gran variedad de dolencias y puede deberse a diferentes causas.
Existen tres grados de lumbalgia, que dependen de su duración:
- Agudo: dura menos de un mes
- Subagudo: dura entre uno y tres meses
- Crónico: dura más de 12 semanas
Síntomas de lumbalgia
La lumbalgia es el resultado de un dolor que irradia desde la espalda. Dependiendo de la naturaleza y la causa del dolor de espalda, este puede extenderse:
- Hasta el muslo
- Hasta la ciática
- Hasta la ingle y la parte delantera del muslo
- Hasta las caderas
- Hasta las nalgas
- Hasta la altura del riñón
En función de su gravedad, puede impedir el movimiento hasta el punto de dificultar la realización de las actividades diarias.
Diagnóstico del lumbago
El médico por lo general se basa en un análisis objetivo y en la historia clínica del paciente para diagnosticar las causas del dolor de espalda.
En determinados casos específicos (por ejemplo, si el dolor de espalda es de origen traumático, si existe la sospecha de una patología específica tras el análisis objetivo o si los tratamientos prescritos no surten efecto al cabo de un mes), pueden ser necesarias las siguientes pruebas de diagnóstico:
- Radiografía de la espalda
- TAC
- Resonancia magnética
- Extracción de sangre
- Electromiografía
- Mielografía
¿Cuáles son las causas del lumbago?
Las causas del lumbago pueden ser variadas; las más comunes son pequeñas lesiones, distensiones, contracturas, esguinces o ciática.
Los factores de riesgo más comunes son el tabaquismo, el sobrepeso y la obesidad, el estrés, llevar un estilo de vida sedentario, el uso de zapatos de tacón, el entrenamiento deportivo demasiado intenso o realizado de forma incorrecta, una postura incorrecta, un colchón inadecuado, la maloclusión dental y los golpes de frío.
Las mujeres también pueden experimentar dolor de espalda de diversa importancia causado por el síndrome premenstrual o el ciclo menstrual, endometriosis, quistes ováricos o fibromas uterinos, embarazo (especialmente en el último trimestre), etc.
Por último, aunque estos casos son más raros, el lumbago puede ser un síntoma de enfermedades más graves que afectan a la espalda, por ejemplo, diferentes formas de artritis, hernia discal, escoliosis, espondilitis anquilosante, apendicitis, cálculos renales o quistes, etc.
¿Se puede prevenir?
Puede tratar de evitar la aparición del dolor de espalda de las siguientes formas:
- Practicando actividad física
- Mejorando la postura
- Practicando técnicas de relajación para controlar el estrés
- Deshaciéndose de los kilos de más
- Ejercicios de estiramiento
- Aprendiendo a levantar pesos de la manera correcta para no causar desgarros
- Usando un buen colchón
Tratamientos para el lumbago
Para tratar el lumbago, el médico puede sugerir tratamientos como:
- Medicamentos para el dolor
- Sesiones de fisioterapia
- Masajes
- Aplicaciones de calor (para deshacer los nudos musculares) o hielo (para reducir la hinchazón y la inflamación) en las partes doloridas
- En caso de que el paciente presente hernia discal, puede ser aconsejable la ozonoterapia
- Si la hernia discal es particularmente dolorosa, o si el paciente sufre estenosis espinal o espondilolistesis, se puede considerar la cirugía